Por Santiago Figueroa
Ismael “El Mayo” Zambada, una de las figuras más influyentes del narcotráfico en México, está en negociaciones para declararse culpable y llegar a un acuerdo con la Fiscalía de Estados Unidos con el objetivo de evitar la pena de muerte, según reportó la agencia Reuters. Esta noticia marca un giro significativo en la historia del capo, quien durante décadas logró evadir la captura, convirtiéndose en uno de los criminales más buscados del mundo.
En septiembre de 2024, Zambada se declaró inocente de 17 delitos graves ante un tribunal federal en Nueva York, incluyendo tráfico de drogas, lavado de dinero y posesión de armas; Sin embargo, nuevas declaraciones de su defensa sugieren que el narcotraficante no pretende ir a juicio y busca alcanzar un trato con la justicia estadounidense. Analistas legales han señalado que, en casos similares, los acusados suelen negociar para reducir sus sentencias a cambio de cooperación o de aceptar ciertos cargos menos graves.
Ismael, de 77 años de edad, fue capturado en julio de 2024 en un aeródromo de Nuevo México, junto con Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo” Guzmán, en una operación clave para las fuerzas de seguridad de Estados Unidos. La captura de ambos narcotraficantes representó un golpe significativo para el Cártel de Sinaloa, organización que ha liderado durante años en ausencia de su antiguo socio, Joaquín “El Chapo” Guzmán condenado a cadena perpetua en Estados Unidos.
El abogado del “Mayo”, Frank Pérez, aseguró que su cliente está dispuesto a aceptar su responsabilidad por ciertos cargos que no impliquen la pena capital. En una entrevista con el periodista Loan Grillo, Pérez explicó que la cuestión clave en este momento es determinar si la fiscalía estadounidense pedirá la pena de muerte. “Si se decide que no la solicitarán, entonces sí, está interesado en un acuerdo de culpabilidad”, afirmó.
El abogado también enfatizó que Zambada no ha brindado información a fiscales o agentes estadounidenses sobre otros narcotraficantes o políticos corruptos en México. Según Pérez, su cliente no busca convertirse en informante, sino alcanzar un acuerdo para evitar la pena de muerte sin delaciones.
Por su parte, el fiscal general de México, Alejandro Gertz Manero, informó que el gobierno mexicano mantiene un proceso de extradición contra Zambada por tres órdenes de aprehensión vigentes. En diciembre, el Departamento de Estado de Estados Unidos reconoció la solicitud, y México ha insistido en cuatro ocasiones para que se resuelva.
Frank desmintió que su cliente esté intentando chantajear al gobierno mexicano con la carta enviada al consulado en Nueva York. Según el abogado, el documento fue preparado por su equipo legal en respuesta a la naturaleza extraordinaria de su detención y traslado a Estados Unidos, sin un proceso de extradición formal. Mientras tanto, las autoridades estadounidenses continúan evaluando los términos de un posible acuerdo.