El desfile del Día de Muertos: un estereotipo, propaganda y catalizador emocional
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Diálogos

2 Ago, 2023
“A pesar de que intentamos mantener vivas estas tradiciones como una forma de ritual-tributo, no hemos podido escapar de las manos de los estereotipos que han implementado otras culturas desde una visión lejana a la mexicana. Un caso representativo de que nuestra cultura del Día de Muertos se ha visto modificada por entes ajenos a nuestras tradiciones es la realización del Desfile del Día de Muertos en la misma capital de nuestro país.”

Ensayo: Tercer lugar

Por: Pablo Humberto Fernández de Lara Cárdenas

La llegada del otoño, cercana al mes de octubre, representa una etapa peculiar en diversos países. En México ligamos esta estación con nuestra celebración del Día de Muertos. El olor a incienso y cempasúchil, el color del papel picado, las veladoras, calaveritas de azúcar, frutas y todo tipo de alimentos construyen un altar en honor a aquellas personas que ya no están en este mundo terrenal. Nuestra típica celebración destaca por darle la bienvenida a nuestros muertos del más allá una vez al año, quienes regresan para disfrutar de su ofrenda.

El Día de Muertos tuvo un origen más sensible e individual, apegado a un ritual típico de la época prehispánica de México, donde los muertos eran enterrados envueltos en un petate mientras sus más allegados preparaban una fiesta para encaminarlos hacia el Mictlán, el lugar de descanso eterno para las almas de los fallecidos.

A pesar de que intentamos mantener vivas estas tradiciones como una forma de ritual-tributo, no hemos podido escapar de las manos de los estereotipos que han implementado otras culturas desde una visión lejana a la mexicana. Un caso representativo de que nuestra cultura del Día de Muertos se ha visto modificada por entes ajenos a nuestras tradiciones es la realización del Desfile del Día de Muertos en la misma capital de nuestro país.

Este evento surgió gracias a la producción de la película 007: Spectre, una de las muchas que narran la historia del agente James Bond. En este filme de 2015, el comienzo de la trama se situaba en el centro de la Ciudad de México, donde se realizaba un desfile que hacía referencia a las fechas de conmemoración por el Día de Muertos. Destacaban la participación de personas con pintura de catrines en su rostro y globos aerostáticos de las mismas figuras, pero con un tono más sombrío y sin los colores y elementos tradicionales de nuestras ofrendas y vestimentas.

Partiendo de este producto cinematográfico, el Gobierno de la Ciudad de México decidió en 2016 llevar a cabo el desfile como parte de la conmemoración, aunque en este caso sí se incluirían elementos típicos y folclóricos de la identidad mexicana.

Pero la finalidad de este evento no ha sido únicamente de carácter festivo, sino también con una intención económica en beneficio de nuestro país, pues su realización implica un apoyo a la derrama económica ante las crisis que pueden afectar a la región.

Ante este fenómeno, la antropóloga Gloria Angélica Falcón Martínez aseguró que el desfile del Día de Muertos es el resultado de una visión extranjera constante de nuestro país como un territorio exótico, que se plasma claramente en la película de Spectre.

Esto también envuelve al ámbito político, pues los dirigentes suelen aprovechar estas movilizaciones para generar una propaganda de sus imágenes y partidos. Ejemplo de ello es la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum quien, al verse vinculada como candidata a la presidencia del siguiente sexenio, utiliza el desfile del Día de Muertos como una forma de propaganda política para impulsar y concretar su postulación al poder ejecutivo de la República.

Además, el desfile influye en otro elemento que también debemos considerar, que es el de las emociones, pues actúa como catalizador en dicho rubro para el pueblo mexicano.

Al ser de naturaleza gratuita, muchos capitalinos tienen la posibilidad de brindarle a sus familias un espectáculo que amplíe su visión cultural sobre las costumbres que le brindan identidad a su país, pero también actúan como una especie de catalizador emocional con el fin de brindarles cierta estabilidad ante sus respectivas preocupaciones.

Foto © Getty Images

Todos estos elementos indican que el desfile del Día de Muertos no solamente tiene una finalidad cultural, pues también apoya a los sectores económicos y al beneficio mental y rutinario de sus espectadores.

Sin embargo, a pesar de que el evento haya surgido como consecuencia de un filme, es importante la identidad que se le impregna si queremos llevarlo a cabo como una celebración contemporánea, respetando los múltiples elementos típicos de estas fechas, así como las verdaderas raíces de la celebración.

La estética de nuestra celebración ha evolucionado ante la fusión de las tradiciones puramente mexicanas y los productos o eventos generados por entes ajenos a nuestra cultura, pero no hemos abandonado nuestros orígenes ni la naturaleza de considerar el Día de Muertos como un ritual en memoria de nuestros seres queridos fallecidos. El desfile debe ser considerado como una herencia de Hollywood, pero su formación fue gracias al interés de nuestros compatriotas por reflejar las verdaderas tradiciones mexicanas, aunque es innegable que su explotación como producto estereotipado, o su uso como propaganda, deja muchas dudas entre las personas sobre si de verdad estamos haciendo honor a una festividad tan sagrada e histórica de nuestro pueblo.

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