El valor de la historia
j

Diálogos

15 Nov, 2022
“La razón por la cual llegó Estela Ruíz Velázquez al billete de 10 pesos fue gracias a un certamen de trajes regionales realizado por el gabinete presidencial de Lázaro Cárdenas del Río.”

Por Saúl Ismael Rivera Sarmiento / riverajournal@gmail.com

El otro día, amable lector, un servidor se encontraba revisando una breve colección de billetes antiguos pertenecientes a diferentes épocas de nuestro país, en los que cuyas imágenes ilustrativas aparecen diferentes escenarios de la geografía nacional, así como diversos personajes de la historia mexicana. Entre ellos, destaca uno que me llamó mucho la atención, no sólo por la fama que gozó en su momento cuando se encontró en circulación, sino también, por el valor que poseía en aquel entonces y que hoy en día, resulta hasta cierto punto risible el hecho de pensar, que llegase a haber un billete con tan bajo valor como para hacerse merecedor de tener su propio papel moneda. En este caso, me refiero al clásico billete de “la tehuana” que cobró popularidad en nuestro país, a mediados de la década de los años treinta del siglo pasado.

Desde un comienzo, vale la pena resaltar que en aquel entonces la elaboración del papel moneda mexicano perteneciente a la familia AA, corría a cargo de la “American Bank Note Company” (Compañía Americana de Billetes); es decir, la compañía que elabora los dólares estadounidenses, por lo que la influencia en cuanto al tipo de decorado, paleta de colores y características de diseño, poseen un parecido muy semejante al de los dólares americanos, sobre todo, por la duradera calidad del papel con la que se fabricaron dichos billetes de la familia AA, desde 1936 hasta 1978, debido a que el Banco de México (Banxico) no contaba con una maquinaria cuya tecnología, fuese la suficiente para producir billetes en nuestro país, la cual se pudo hacer presente sino hasta 1969.

Pero referente a la identidad de la icónica imagen de la mujer conocida como “la tehuana” que ilustró dicho billete, se trata de Estela Ruiz Velázquez, quien efectivamente era originaria del municipio de Tehuantepec, Oaxaca; que emigró junto a su familia a la Ciudad de México, con la idea “revolucionaria” de progresar tanto en lo económico, como en lo educativo.

Sin embargo, cuando el general Lázaro Cárdenas gobernó nuestro país, como parte de su ideología nacionalista, una de sus medidas dentro de su administración “para hacer país”, fueron la de imprimir billetes con imágenes alusivas a nuestra cultura nacional, y al ensalzamiento de la imagen de pueblos indígenas y sus comunidades, debido a sus medidas proteccionistas a estos sectores originarios de México.

Pero, la razón por la cual llegó Estela Ruíz Velázquez al billete de 10 pesos fue gracias a un certamen de trajes regionales realizado por el gabinete presidencial de Lázaro Cárdenas del Río, y coordinado por la Dirección de Pensiones de México, antecesora del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en el Frontón México, ante el cual todas las concursantes fueron originarias del istmo de Tehuantepec. Finalmente, la ganadora del concurso resultó ser la propia Estela Ruíz quien, tras una sesión de fotos, presentaron su imagen a la Casa de Moneda para ser utilizada como imagen del billete de 10 pesos.

No obstante, lo curioso dentro de todo este contexto sobre la historia de tan recordado billete, es lo contrapuntal que puede resultar el saber que hoy en día, tras tantos cambios en los diseños y calidad de nuestros billetes por parte del Banco de México, traiga la nostalgia, sobre todo para aquellos que llegaron a usarlos, por el amplio rendimiento que podía tener el valor de dicho billete.

De sobra sabemos que nuestra moneda mexicana no es la más fuerte, y es que tras las devaluaciones que ha sufrido (especialmente la más dura, la de 1994) cada vez más, su valor es “insignificante”. Pero ¿qué tal el precio que ostenta el billete de “la tehuana” para los coleccionistas, que oscila entre 115 y 1374 pesos? Indudablemente, “conserva todavía su amplio valor”, tras casi 50 años de ya no encontrarse en circulación nacional.

Categorías: Diálogos
Etiquetas:

Quizá también te interese leer…

El día en que la música volvió a morir: 18 años sin Dimebag Darrell

El día en que la música volvió a morir: 18 años sin Dimebag Darrell

“La noche del 8 de diciembre de 2004 en el club Alrosa Villa, ubicado en Columbus, Ohio, lugar donde Damageplan se presentaría a tocar como parte de la gira promocional de su álbum debut Nathan Gale, un exmarine de 25 años, antiguo fan de Pantera y con antecedentes de esquizofrenia, subió al escenario donde la banda se encontraba tocando y disparó a quemarropa a Dimebag Darrell, quien falleció a la edad de 38 años.”

Humanos

Humanos

“En la conferencia de prensa los periodistas se encontraban ansiosos por conocer la historia de ‘Humanos en cosméticos’. Ya no había manera de defender al empresario, todo se había vuelto perturbador como el inicio del caso.”

Un viaje de autodescubrimiento y aprendizaje en Abu Dhabi: GMC

Un viaje de autodescubrimiento y aprendizaje en Abu Dhabi: GMC

“La sed y entusiasmo por hacer contenido escrito y audiovisual está presente en cada rincón del Abu Dhabi National Exhibitions Company (ADNEC). Es el lugar ideal para conocer sobre la manera en cómo se realiza periodismo en todo el mundo, permitiendo cuestionar qué es lo que hace falta en México para conseguir productos de calidad, serios y veraces.”

La pluma que dicta el desarrollo de la obra de Márquez

La pluma que dicta el desarrollo de la obra de Márquez

“El lenguaje es, en sí mismo, lenguaje si cumple con la función de comunicar y puede ser compartido, pero, sobre todo, entendido por los demás. Gabriel García Márquez no hace más que proclamar este argumento en sus relatos, haciendo énfasis en El otoño del patriarca, que sin duda es una de sus novelas más complejas para su entendimiento.”

El mercado como sostén de la economía

El mercado como sostén de la economía

“Este negocio es, sobre todo, para darle una educación a mis hijos, para brindarle a mi familia tranquilidad y seguridad con mi trabajo”: Juan Cuevas, comerciante del Mercado América de Naucalpan de Juárez.

Obsesión

Obsesión

“Tictac. Mi mente no deja de darme vueltas desde que lo conozco. Siempre he intentado llamar su atención. Usaba la falda del uniforme corta, intentaba que me tocara cada dos por tres y eso nunca funcionó. Tictac. Deberé hacer algo que va completamente en contra de mis principios.”