Por: Andrés Bogard Gutiérrez
Los videojuegos están de nuevo en el centro de la polémica, por un lado, se ven como un medio de entretenimiento que permite a los jugadores ser parte de una experiencia; por otro, se ven como una adicción que afecta a las personas volviéndolas dependientes a jugar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasificó la adicción a los videojuegos como una enfermedad mental, que provoca un aislamiento social y de la realidad; cambiando el discurso que dieron en 2020, en el que recomendaban jugar videojuegos para llevar de mejor manera el confinamiento por la pandemia.
Al comienzo de la cuarentena se tenían pocos datos sobre la epidemia por coronavirus, que estaba y sigue afectando al mundo; pero una de las primeras indicaciones era el quedarse en casa, para evitar espacios con muchas personas y, por ende, la propagación del virus.
Pero al cambiar la rutina normal de las personas de una manera tan radical, como lo fue el confinamiento, provocaba una desesperación en la sociedad que estaba acostumbra a realizar la mayoría de las actividades fuera de casa, fue en este punto en el que la OMS, se preocupó por la salud mental de las personas.
Los videojuegos desde su creación hasta hoy, tienen el mismo objetivo, entretener a las personas, con historias o aventuras que te atraparan por horas, en donde el jugador es la parte más fundamental en el juego, ya que es el que lleva el hilo conductor de la narrativa.
Este fue el atractivo que llamó la atención de los mandatarios de la organización, los videojuegos podían ser el medio perfecto para que las personas se quedaran en casa jugando sin que tuvieran la necesidad de salir, pero sobre todo para cuidar la salud mental de las personas.
Los videojuegos no solo ofrecen un modo en solitario, también está la modalidad en línea, la cual ha tomado gran repercusión en los últimos años, ya que puedes jugar con quien sea en donde sea, solo tienes que tener acceso a internet.
Tanto como la modalidad en línea o en solitario, son un medio de entretenimiento para cualquiera, pues no excluye a nadie de la sociedad; por estas razones la OMS recomendó jugar videojuegos para tener un cuidado a la salud mental
Diversas compañías de videojuegos se unieron al movimiento de la OMS, al regalar diferentes juegos para todos, buscando crear más usuarios a sus plataformas y darle a la sociedad un medio de entretenimiento gratuito.
Con los nuevos estudios de la pandemia, el conocimiento de dos años y la vacunación a nivel mundial, el discurso cambió drásticamente, los videojuegos que se veían como aliados pasaron a ser parte del problema.
En febrero de 2022, la OMS actualizó la lista de enfermedades y por primera vez aparece la adicción a los videojuegos, en específico en la categoría de desórdenes mentales; la investigación mencionó el “uso peligroso de los videojuegos” en los jugadores.
“La adicción a videojuegos se caracteriza por un patrón de comportamiento de juego persistente o recurrente, que puede ser en línea o fuera de línea”, explicó la OMS en la nueva lista de enfermedades.
En el comunicado se dice que los videojuegos generan una adicción en quien los juega, llegando en algunos casos hasta volverse dependientes a jugar, afectando su salud, así como la convivencia con otras las personas.
Un miembro de la OMS, Robert Jakob, mencionó que algunos de los síntomas a la adicción a los videojuegos son: no poder parar de jugar en internet o en una consola; desentender las amistades o el trabajo, en periodos que superen un año.
¿Qué provocó el cambio del discurso? El incremento de jugadores desde 2020 hasta principios de 2022 es enorme; un estudio realizado por la empresa The Competitive Intelligence Unit, demostró que los jugadores o también llamados “Gamers” han crecido 5.5% en México, a causa del confinamiento por la pandemia.
Esto preocupa a la OMS, ya que sin el debido cuidado se puede llegar a convertirse en una adicción severa para los jugadores, que tienen una comunidad que crece cada vez más.
Los videojuegos buscan ser atractivos para cualquiera, pero esto es un arma de doble filo, al ser tan llamativos son adictivos para los que no sepan moderar sus tiempos de juego, en algunos casos volviéndolos su única importancia, descuidando los demás aspectos, que van desde lo social como lo relacionado a la salud.
Se realizaron entrevistas a diferentes jugadores para comprender más a fondo el tema, los entrevistados tienen diferentes edades y algunos juegan de manera casual mientras que otros de manera frecuente.
Al ser cuestionados sobre ¿por qué juegan videojuegos? Las respuestas fueron similares, que juegan para distraerse o para desesterarse de un día pesado, al igual que esta es la manera en la que mantienen contacto con sus amigos, porque no se pueden ver por la pandemia.
En la siguiente pregunta los entrevistados estuvieron de acuerdo: ¿Crees que jugar videojuegos pueda llegar a ser una adicción? Las respuestas fueron, que sí puede llegar a generar una adicción por ser tan absorbentes y demandantes con el rendimiento del jugador, pero que esto se puede controlar si se miden tus tiempos de juego.
Pero la discrepancia entre los jugadores llegó con la pregunta: ¿Qué opinas de la clasificación de la OMS a la adicción de los videojuegos? En donde se formaron dos opiniones distintas, por un lado, se menciono que es drástico el diagnostico de la OMS, al ser comparados con otras enfermedades como depresión o esquizofrenia, mientras que el otro lado lo ve como una manera fácil de crear una adicción al ser más accesibles para todos y llamativos.
Con esta encuesta podemos observar que la opinión también está dividida entre los jugadores, sobre si fue o no un acierto la clasificación de la OMS esto puede ser una medida preventiva para los jugadores que pasan horas enfrente de una consola buscando que regulen sus tiempos de juego y no cree una adicción a jugar videojuegos.
Pero al igual que algunos jugadores, las empresas más grandes de videojuegos se pusieron en contra del nuevo listado, llamando a que se analice a fondo el estudio y al igual se hablé sobre los beneficios que tiene jugar videojuegos.
En donde declararon lo siguiente: “Al igual que los entusiastas de los deportes y los consumidores de todas las formas de entretenimiento, los jugadores son apasionados y dedicados con su tiempo. Después de haber cautivado a los jugadores durante más de cuatro décadas, más de 2 mil millones de personas en todo el mundo disfrutan de los videojuegos.
“La Organización Mundial de la Salud sabe que el sentido común y la investigación objetiva demuestran que los videojuegos no son adictivos. Y, poner esa etiqueta oficial en ellos trivializa imprudentemente problemas reales de salud mental como la depresión y el trastorno de ansiedad social, que merecen tratamiento y toda la atención de la comunidad médica. Alentamos encarecidamente a la OMS a que cambie de dirección en su acción propuesta.”
Tanto el tema de la adicción a los videojuegos como si estos mismos generan una cultura de violencia, deben de ser analizados con cuidado, para no desprestigiar un medio de entretenimiento o por otro parte dejar algo tan adictivo al alcance de cualquiera.