Por María de Jesús Hernández
La doctora Wendy Jarquín Orozco habló sobre la violencia política contra las mujeres en razón de género, durante su conferencia: “La erradicación y sanción de la violencia política de género en el marco de la justicia electoral”, impartida ante la comunidad estudiantil de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, el 24 de octubre.
La Jefa de la Unidad Académica de la Escuela Judicial Electoral del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, invitó a los estudiantes de periodismo a cuestionar el número de cargos que ocupan las mujeres en la política, “entre más alto es el cargo, hay menos mujeres”, indicó.
En México, el derecho al voto femenil se concedió en 1953, pero no fue hasta 1995 que las mujeres fueron reconocidas formalmente como ciudadanas; es decir, tuvieron derecho a votar y ser votadas.
Durante la quinta conferencia de la Cátedra de la Escuela de la Judicatura, la doctora Jarquín Orozco recordó que “hace 72 años empezamos a ser ciudadanas en México” y compartió su indignación de cuánto tardó este derecho para las mujeres mexicanas, pues a diferencia de países como Nueva Zelanda, las mujeres ya podían votar y ser votadas en 1883, mientras que en México se logró hasta 1953 y en 1955 pudieron participar en votaciones políticas.
Posteriormente, la ponente habló con los estudiantes de periodismo acerca de las cuotas de género y explicó que su propósito era dejarles un espacio a las mujeres en espacios laborales y educativos, no sólo políticos.
Debido a las cuotas de género, en 2008 participaron 60 mujeres de 40 candidaturas en el Congreso de la Unión, pero éstas desaparecieron en 2014 y se implementó el principio de Paridad de Género, principio que busca la participación y representación equilibrada de mujeres y hombres en puestos de poder y toma de decisiones en todos los ámbitos de la vida, como político, económico y social.
La también profesora del Tecnológico de Monterrey, campus Ciudad de México, dio a conocer que, por paridad, 251 mujeres participan en la Cámara de Diputados, “ya somos la mitad”, expresó.
Por otro lado, recordó que, en 2019, la Paridad de Género se reconoció en todos los poderes de la unión. La doctora Jarquín Orozco invitó a los presentes en la conferencia a cuestionar el número de mujeres que ocupan cargos políticos mayores.
De igual manera, hizo énfasis en la discriminación por cuestión de género en los medios de comunicación: “Los medios de comunicación pueden ejercer violencia en contra de las mujeres”, dijo. Dicha violencia la catalogó como “simbólica”, pues se ejerce a través de estereotipos de género y afirmó que es “la peor”, pues a veces no se es consciente de ejercerla y dio a conocer que la violencia digital es más común contra las mujeres.
“Cuando hay violencia, hay discriminación”. La ponente recordó un problema en México, los feminicidios, y explicó la supuesta “discriminación a la inversa”, “asesinan a los políticos, pero no por ser hombres. A las mujeres sí las matan por ser mujeres”, visibilizando la violencia contra la mujer en México, y recalcó que la constitución mexicana no permite la violencia contra el género femenino.
La conferencista aprovechó el tema de discriminación para abordar la importancia del lenguaje y los “microfeminismos”. Mencionó y visibilizó el pronombre “todas” en lugar de pluralizarse como “todos”, pues según ella, es otro modo de excluir a las mujeres.
Igualmente, habló sobre la importancia del lenguaje inclusivo y recordó a su “amigue”, el magistrade Jesús Ociel Baena Saucedo, a quien asesinaron junto a su pareja en 2023. “Una vez que asesinaron a Ociel, se acabó todo”, se refirió a la conversación de las personas que se identifican como “no binarias”.
Finalmente, la doctora en derecho, Wendy Jarquín Orozco, invitó a los próximos periodistas a tener espíritu crítico y “cachar” cuando reproducen estereotipos de género.
 
					









